
La seguridad aérea del país sigue en el centro del debate tras el fracaso, por segunda vez, de la sesión de la Comisión de Transporte y Telecomunicaciones de la Cámara de Diputados. En esta instancia se esperaba abordar, junto a la ministra de Defensa, Maya Fernández, las razones detrás del incumplimiento de los compromisos adquiridos tras las movilizaciones realizadas por los controladores de tránsito aéreo en octubre de 2023.
La sesión no pudo realizarse debido a la falta de unanimidad entre los parlamentarios para aceptar la exposición de Galo Eidelstein, subsecretario para las Fuerzas Armadas, como reemplazo de la ministra. Los diputados argumentaron que, dada la relevancia de los temas en discusión, era indispensable la presencia de la Secretaria de Estado. Además, el director general de Aeronáutica Civil, General de Aviación, Carlos Madina, también se excusó de asistir en ambas fechas. Según trascendió, su presencia habría permitido llevar a cabo la sesión, incluso en ausencia de la ministra.
Este escenario se repitió por segunda semana consecutiva, luego de que la semana pasada el Ministerio de Defensa enviara a otros representantes, quienes tampoco fueron aceptados como interlocutores por los miembros de la Comisión Parlamentaria.
A la salida de la fallida reunión, los representantes del Colegio de Controladores de Tránsito Aéreo lograron sostener una conversación directa con el subsecretario Eidelstein, quien confirmó la aprobación de una inversión cercana a los 8 millones de dólares para la compra de sistemas de visualización radar destinados al Centro de Control de Santiago y a la torre de control de del Aeropuerto Merino Benítez. Según Eidelstein, la inversión ya cuenta con la firma del ministro de Hacienda, Mario Marcel, y solo resta un decreto para su implementación. Asimismo, se comprometió a retomar el diálogo con el gremio en marzo.
El presidente del Colegio de Controladores, Jorge Caro, destacó la presión ejercida por los parlamentarios para avanzar en asuntos críticos para la seguridad aérea. Además, valoró la disposición del subsecretario Eidelstein y expresó su esperanza de que los compromisos asumidos para este año finalmente se cumplan. “Es fundamental que las autoridades comprendan la urgencia de estos temas y den respuestas concretas para fortalecer la seguridad aérea, que es esencial para todos los chilenos”, afirmó.
Pese a los avances puntuales, los controladores siguen preocupados por la falta de seguimiento a los acuerdos alcanzados tras las movilizaciones de 2023, los cuales incluían mejoras urgentes en infraestructura y tecnología para el control del espacio aéreo. La presión desde el Congreso y el diálogo directo con las autoridades serán fundamentales para garantizar que estas demandas se traduzcan en acciones concretas en el corto plazo.
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